Las burekas son un tipo de empanada, típica de la gastronomía israelí. Aunque pueden hacerse con distintos rellenos, lo más típico es el relleno de queso o ricota, y el sésamo que lleva arriba le da un sabor especial. Son ideales para picoteos, cocktails o de entrada.

Ingredientes (rinde 16 burekas tamaño mediano)

• 2 planchas de hojaldre refrigerado (lo venden listo en el supermercado; si la forma es redonda, mejor comprar 3 o 4, ya que rinde menos)
• 1 taza de queso feta desmenuzado
• ½ taza de ricota
• 1 huevo
• Sal y pimienta a gusto
• Decoración: un huevo y sésamo

 Preparación

Mezcla el queso feta con la ricota, luego agrega el huevo batido previamente, y sal y pimienta a gusto. Reserva el relleno.

Extiende la plancha de hojaldre con cuidado, y córtala con un cuchillo o un cortador de pizza, formando cuadrados del tamaño que desees (yo prefiero hacer burekas pequeñas, pero considera que al doblarlas reducen el tamaño). Rellena los cuadrados con un poco del relleno de los quesos, cuidando que al doblarlas no sea excesivo el relleno y no se salga por los lados. Bate el huevo restante, y pon con el dedo un poco de huevo en dos extremos de cada cuadrado, cuidando de cubrir un ángulo recto. Cierra las burekas formando un triángulo, apreta levemente los bordes y luego apreta con un tenedor de modo que se cierre mejor y al mismo tiempo darle una forma más bonita.

Pon las burekas en una lata de horno previamente enmantequillada (o con papel mantequilla), levemente separadas entre sí, píntalas encima con el huevo y agrega las semillas de sésamo, presionando levemente para que se peguen. Lleva al horno (220 °C) hasta que la masa se vea cocida y dorada (aproximadamente unos 15 20 minutos, en horno precalentado).

 Tips

• Puede ponerse arriba amapola en vez de sésamo.
• Para variar un poco el relleno puede reemplazarse el queso feta por queso fresco de cabra o de oveja.