Esta tortilla la inventé un día en que no tenía muchas ganas ni tiempo para cocinar. Por tanto, es muy rápida de hacer, y la mezcla de sabores, especialmente la crema de queso de cabra, le dan un gusto muy especial. La gracia además en relación a otras tortillas o una frittata, es que las verduras quedan crudas. Aquí van mis opciones, pero en realidad se puede rellenar con lo que se desee.

Ingredientes (para 2 personas)

• 4 huevos
• 1 cucharada de aceite de coco
• 2 cucharadas de crema de queso de cabra (Chavroux)
• 1 taza de tomates cherry y pera, picados finos
• ½ taza de aceitunas descarozadas y cortada en gajos
• ½ pimiento amarillo cortado en juliana
• ½ cebolla pequeña, cortada en juliana
• 1 cucharada de cilantro fresco picado (o perejil)
• Sal y pimienta fresca
• 2 cucharadas de queso Philadelphia (para acompañar)

Preparación

Pon a calentar el aceite de coco en un sartén. Bate dos huevos en un pocillo y agrega al sartén, deja cocinar por un lado a fuego bajo, sin revolver. Cuando la parte de abajo esté cocida, y la parte de arriba ya no tenga líquido, da vuelta la tortilla. Agrega a una mitad 1 cucharada de la crema de queso de cabra, distribuida en pelotones, y distribuye la mitad de los tomates, pimiento, cebolla y cilantro. Condimenta con sal y pimienta, cierra la tortilla por la mitad y deja cocinar por uno o dos minutos a fuego muy bajo. Da vuelta la tortilla con mucho cuidado para que no se caigan los ingredientes, y cocina un minuto más. Retira y repite el procedimiento con los ingredientes sobrantes. Sirve caliente, acompañando de una cucharada de queso Philadelphia. Si quieres, puedes agregar ensalada de hojas verdes.