Esta es otra variación de los pasteles húngaros. Como la amapola es más seca y fuerte de sabor, la mezclé con nueces y almendras, logrando una excelente combinación.
Ingredientes
Masa:
- ½ kilo de harina sin polvos de hornear
- ½ paquete de levadura fresca (19 gr)
- ¼ taza de endulzante en polvo (Stevia, Splenda, Truvia, o misma cantidad de azúcar)
- Sal
- 1 ¼ tazas de leche
- 2 huevos
- 125 gr. de mantequilla
- Un chorro de aceite de maravilla
Relleno:
- 1 taza de amapola
- 1 taza de nueces molidas
- 1 taza de almendras molidas
- Un poco de mantequilla, a temperatura ambiente
- 2 cucharadas de endulzante en polvo
- Canela en polvo (opcional)
Preparación
En un tercio de taza de leche tibia pon 2 cucharaditas de azúcar, y disuelve. Agrega la levadura rompiéndola un poco y que quede cubierta por la leche, cubre con un poco de harina y deja tapado con unos paños en un lugar caliente para que fermente, unos 10 minutos.
Cierne la harina, ponla en un recipiente hondo grande y haz un hoyo al medio. Agrega los huevos enteros previamente batidos con un tenedor, el endulzante, la mantequilla ablandada (puedes dejarla fuera del refrigerador un rato antes o ponerla un poco en el microondas), una pizca de sal, la levadura ya fermentada, un chorro de aceite y la leche restante, tibia. Amasa con la mano hasta que todo se impregne bien y quede un solo bolo. Se formará una masa blanda y si queda pegajosa no te preocupes. Deja reposar la masa tapando el recipiente con un paño y dejando en un lugar caliente, hasta que la masa suba, y haya duplicado su volumen inicial (aproximadamente una hora).
Por mientras prepara el relleno. Saltea unos minutos la amapola en una sartén, hasta que despida un olor tostado, pero cuidando de que no se queme. Mezcla con las nueces y almendras molidas, y el endulzante. Reserva.
Prende el horno y precalienta a 200 °C, enmantequilla y enharina una lata para horno. Divide la masa en dos. Uslerea la masa bien delgada, en forma rectangular. Esparce un poco de mantequilla a temperatura ambiente sobre ella, espolvorea un poco de endulzante y canela. Cubre con la mitad del relleno de amapola, cuidando de cubrir todas las partes excepto el borde en el que se va a cerrar (uno de los bordes largos). Pon un poco de huevo batido sobre ese borde, y enrolla la masa con el relleno a lo largo, empezando por el borde que sí tiene relleno. Al terminar presiona un poco el borde para que se pegue con el huevo y deja el borde hacia abajo del rollo (queda como un brazo de reina). Repite con la masa guardada.
Pon los rollos en la lata bastante separados entre sí, cubre con un paño y deja subir unos 5 o 10 minutos más. Luego píntalos por encima con la yema de dos huevos batidas (si quieres agrega un poco de amapola arriba como decoración) y lleva al horno unos 30-40 minutos, hasta que la masa se cocine y los rollos estén dorados. Retira, espera unos 5 minutos a que se enfríen un poco y corta en rodajas del grosor que desees. Deja enfriar y guarda en el refrigerador. Puedes servirlos fríos, o entibiarlos en el horno o microondas, antes de servir.