Esta es una versión adaptada del tradicional postre de arroz con leche, pero está hecho con quínoa, y para que sea más liviano la leche es descremada y lleva endulzante (que se puede reemplazar por miel). Hay que comerlo bien frío, y queda exquisito. Es un postre con olor a infancia!

Ingredientes

• 1 litro de leche descremada
• 80 gr endulzante
• 250 gr de quínoa
• Cáscara de una mandarina (o de un limón amarillo)
• Canela en polvo

 Preparación

Pon la leche con el endulzante y la cáscara de mandarina en una olla, y pon a calentar a fuego moderado. Revuelve ocasionalmente. Por mientras pon la quínoa en una sartén con un chorrito de aceite y saltea por unos dos a tres minutos, revolviendo para que no se queme. Retira y enjuaga bien en un colador.

Cuando la leche vaya a hervir, agrega la quínoa y cocina al fuego más que puedas (yo pongo la olla arriba de un tostador), con la tapa a medio poner, hasta que la quínoa se cocine, aproximadamente unos 20 minutos. Revuelve ocasionalmente para que no se pegue al fondo de la olla. Cuando ya la quínoa se haya cocinado y esté blanda, retira la olla del fuego, retira la cáscara de mandarina, y deja enfriar un poco. Agrega canela al gusto y prueba como está de dulce. Al enfriarse puede ser que la quínoa se infle más y consuma casi toda la leche; si quieres el postre más remojado, agrega un vaso de leche. Refrigera hasta el momento de servir. Sirve en pocillos individuales y agrega encima un poco de canela en polvo, chia o fruta picada.

Tips

• Puedes poner la cáscara de un limón, en vez de mandarina, o de media naranja
• En vez de endulzante puedes poner miel (unos 180 gr)